
Durante la menopausia, la piel experimenta cambios debido a la disminución de estrógeno y progesterona. Estas hormonas son responsables de mantener la piel firme, elástica e hidratada. Sin ellas, la piel tiende a volverse más delgada, seca, flácida, propensa a arrugas y otros problemas.
¿Cómo cuidar la piel durante la menopausia?
De acuerdo con la asociación de la Academia Americana de Dermatología (AAD, por sus siglas en inglés), los efectos de la menopausia en tu piel incluyen piel seca, manchas de la edad y otros signos de daño solar, hundimientos en la piel, vello facial, caída de cabello, aparición de papada, piel flácida y arrugas.
También aparecen puntos negros y otros tipos de acné, la piel se irrita fácilmente y las heridas sanarán más lentamente.
Piel seca
Usa un limpiador suave en lugar de jabón para evitar resecarla. Aplica una crema hidratante con ácido hialurónico o glicerina para mantenerla hidratada.
Papada, flacidez y arrugas
Usa protector solar diariamente para prevenir daños y usa productos con retinol o péptidos para estimular la producción de colágeno.
Piel dañada por el sol
Aplica protector solar con un factor de protección mínimo de 30 en las áreas expuestas al sol y realiza pruebas de detección de cáncer de piel con un dermatólogo. Muchas manchas en la piel pueden ser propensas a cáncer de piel y el uso de cremas y tratamientos podría retrasar su detección.
Piel hundida o magullada
El protector solar puede ayudar a prevenir el adelgazamiento de la piel y las magulladuras. No engrosa la piel, pero sí previene que se adelgace.
Acné
Usa productos adecuados para pieles maduras y asegúrate de que los productos que elijas no resequen la piel, ya que hay muchos que lo podrían hacer. Consulta a un dermatólogo si el acné persiste.
Cicatrización de heridas
Ten paciencia, ya que la piel puede tardar más tiempo en sanar. Consulta a un dermatólogo si no hay mejoras o si las heridas empeoran.
Cuidar la piel durante la menopausia implica hidratarla adecuadamente, protegerla del sol, tener una alimentación saludable y usar productos específicos para esta etapa. Recuerda consultar a un dermatólogo para obtener recomendaciones personalizadas. Sabemos que puede ser una etapa abrumadora, de muchos cambios y confusión, pero recuerda que no estás sola.
Puedes consultar nuestros cursos y talleres para poder orientarte y dar un diagnóstico adecuado y personalizado.
Cuando visites al dermatólogo no olvides mencionarle por lo que estás pasando para que lo pueda considerar y tu tratamiento sea el mejor para tus necesidades.